España se ha convertido en un país de inmigración y esta nueva realidad hace que se nos olvide nuestra larga tradición emigratoria y que se use políticamente -por algunos partidos- para captar el voto del miedo. Hagamos memoria: España ha sido un país de emigración desde el siglo XVI hasta mediados de los 70.
Artículo completo publicado en »El Expansión» de 24 de Septiembre de 2018
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